Una de las actividades que debemos realizar a la hora de construir un jardín es saber si éste va a estar bien en el lugar donde queramos ponerlo, es decir, si el suelo y la tierra que va a tener es la más adecuada y tiene el pH adecuado.
Para saber eso hay una forma de hacerlo. Lo primero es limpiar el suelo de hierbas y piedras para que esté limpio. Después has de cavar para abrir un orificio vertical de unos 10 centímetros de profundidad.
Con una cuchara recogemos una muestra de la tierra y se vierte en un equipo de análisis (que se puede comprar en tiendas especializadas y en algunas ferreterías). El color del líquido será lo que determine si el suelo es muy ácido, ácido, neutro o alcalino y habrá que actuar en consecuencia.