Todos sabemos que en nuestra casa tenemos un arsenal de productos y alimentos que podrían resultar muy buenos para fertilizar nuestras plantas.
Por ello y para no tener que gastar dinero cada poco comprándolo en la tienda, te vamos a ofrecer tres ideas de fertilizantes caseros para tus amigas.
Fertilizar nuestras plantas, como hacerlo
Si tienes un jardín y sueles recoger malas hierbas con frecuencia, no las tires, puedes reutilizarlas. Para ello puedes colocarlas sobre una tela y envolverlas, como si fuera un hatillo o una bolsa de té gigante.
Llenas un cubo de fregar con agua y dejas la bolsita con las malas hierbas dentro durante unos diez días, lo que producirá un poco de mal olor, por lo que te recomendamos que lo tapes.
Debes removerlo una vez cada día y cuando haya pasado ese tiempo, deshazte de los restos sólidos y quédate con el agua que ha quedado. Con ella regarás las plantas y les aportará muchos nutrientes.
El plátano les aportará un plus de potasio, nutriente esencial para todas las plantas dado que interviene en el proceso de la fotosíntesis así como en la formación de tejidos resistentes y al osmo-regulación del agua de la planta.
Podemos enterrar junto a la planta las cáscaras ya maduras el plátano o hacer una gran infusión con unas cuantas cáscaras, el agua restante será estupenda para las plantas.
Y nos vamos con un clásico, los posos del café. Los nutrientes que aporta se convierten en un abono natural de calidad aunque hay que dejar claro que este abono solo es indicado para plantas que requieran un suelo ácido para su crecimiento como las rosas, hortensias, ciclamen, etc.
Para su preparación hay que diluir los posos de la cafetera en un litro aproximado de agua, lo dejaremos reposar un día entero y después regaremos las plantas con el agua colada.
