Dentro del mundo de la botánica existen muchísimas plantas en todos los rincones del planeta, las cuales habitan en diferentes hábitats y están dotadas de muchas características como tamaño, forma, colores y olores entre muchos otros aspectos.
También hay que tener en cuenta el uso que le damos a las plantas porque pueden servir para decorar, para alimentarnos, construir viviendas o incluso curarnos, como sucede con las plantas medicinales.
El conocimiento sobre las plantas
Existen muchos conocimientos sobre las plantas terapéuticas que se remontan a muchos siglos atrás. Estos saberes, o al menos algunos de ellos, se remontan a muchas de las civilizaciones más antiguas.
Además, ese conocimiento ha podido llegar a nosotros gracias a documentos como el conocido Códice de la Cruz Badiano, un tratado herbolario escrito en el año 1552 y que está considerado de gran importancia, «el último gran herbario medicinal», como se le conoce popularmente.
Algunas plantas terapéuticas
Muchas de las plantas que se encuentran bajo estudio actualmente son viejas conocidas de la medicina tradicional, como por ejemplo el pericón y el cempasúchil, plantas que se han utilizado durante mucho tiempo para poder tratar problemas neuronales como por ejemplo la ansiedad.
Para ello se usan, además de estas plantas, muchas otras como la moringa, romero, clavo, orégano o la damiana, que sirven como analgésicos. El toronjil morado como antidepresivo, la flor de tila con sus propiedades antiepilépticas o también la rodiola para tratar la hipersensibilidad ocasionada por la diabetes entre muchas ortas.
Son muchas las plantas que tienen fines terapéuticos, algunas forman parte del acervo de muchas personas pero otras están siendo investigadas y de momento se están consiguiendo buenos resultados aplicando sus propiedades a animales. Los investigadores aseguran que el secreto de la cura de muchas enfermedades se encuentra en las plantas, pero hay que trabajar e investigar mucho todavía.