De las plantas que pueden utilizar tus hijos para cuidarlas y plantarlas sin mucho problema a la hora de que enraícen y crezcan a pesar de los despistes, los ajos pueden ser una de esas plantas y, además, les enseñamos a los niños de dónde salen algunos de los alimentos que consumimos.
Para plantarlos solo tienes que coger un diente de ajo y ponerlo directamente en la tierra, con la punta hacia arriba. No requiere mucho riego, una o dos veces a la semana, a veces ni eso, porque es una planta que se desarrolla bien por sí sola (aunque si le falta mucha agua no crecerá muy bien que digamos).