¿Estás pensando en preparar tu jardín, diseñar un rincón nuevo o llenar tu terraza de plantas esta primavera? Anímate a cultivar un jardín medicinal.
Existen numerosos tipos de hierbas con un destacado valor terapéutico que nos pueden servir para tratar y prevenir diferentes dolencias.
Este tipo de plantas, han sido incluidas en jardines y huertos desde la antigüedad, en todas las culturas, para usos medicinales o rituales. Con el tiempo, el estudio de este tipo de plantas fue la base de la botánica y la medicina.
Las plantas medicinales son fáciles de plantar y cuidar, tanto en jardines como en huertos, en macetas individuales o jardineras. Pueden ahorrarnos más de una visita a la farmacia, proporcionando solución a diferentes enfermedades y molestias.
A continuación, te damos una lista de plantas que no deberían faltar en tu jardín medicinal:
Manzanilla: Tranquilizante, antiinflamatoria, digestiva, afecciones oculares o de la piel, dolores menstruales.
Salvia: Sistema circulatorio, gastritis, alteraciones hormonales y menstruales, problemas urinarios y acción astringente.
Aloe Vera: Indispensable para tratar quemaduras y afecciones de la piel.
Valeriana: Sedante, relajante, aporta beneficios en caso de migrañas, dolores de estómago y todo tipo de molestias relacionadas con el estrés.
Melisa: Tranquilizante. Recomendable en casos de estrés, insomnio, angustia, taquicardias o problemas digestivos y tratamientos cutáneos.
Hierba Luisa: Planta digestiva, evita flatulencias, es buena contra la bronquitis y muy aromática.
Menta: Problemas digestivos, respiratorios, circulatorios, reumáticos y halitosis.
Malva: Enfermedades respiratorias como catarros, tos, faringitis. También es recomendable para problemas digestivos y usos cutáneos, como picaduras de insectos o eccemas.
Stevia: Edulcorante natural de escaso valor glucémico y calórico. Muy recomendable para personas diabéticas.
Hipérico: Antidepresivo natural, propiedades analgésicas y antibióticas, mascarillas antiacné.