Diversos investigadores en colaboración con el Jardín Botánico de Valencia acaban de poner en marcha un estudio sobre la Nicotiana glauca para poder evaluar si los cultivos de esta especie que está destinada a la producción de biomasa puede convertirse en una amenaza real para la vegetación autóctona de España.
A pesar de haber sido validada desde el Ministerio de Agricultura como cultivo energético, el pasado 2 de agosto esta especie, más conocida como árbol del tabaco, fue incluida en el listado de plantas invasoras.
Por ello y para compatibilizar el cultivo de esta nueva fuente de energía sostenible con todo lo relacionado con la conservación del medio natural han comenzado a realizarse estos estudios sobre la capacidad potencial de expansión de la Nicotiana glauca en España, para saber si existe amenaza real o no.
Diversos investigadores han asegurado que no existen datos científicos para poder evaluar el carácter invasor de la Nicotiana glauca ni tampoco se encuentran trabajos sobre los efectos de esta planta sobre la vegetación en la que se instala en el territorio peninsular ni estudios que permitan evaluar el potencial biológico de la planta en nuestro país y ver qué decisión se puede tomar.