Cuando nos despistamos con las plantas a menudo nos damos cuenta tarde de que una planta se ha marchitado e intentamos por todos los medios poner remedio echándole agua, intentando revivirla.
Sin embargo, quizás un remedio más efectivo, aparte de darle unos mayores cuidados durante unos días, sería usar el zumo de naranja. Este truco lo he probado y efectivamente funciona (aunque en los bonsáis hay que tener cuidado porque según la especie es bueno o malo). Lo que has de hacer es echarle por encima el zumo de una naranja y ver cómo vuelve a la vida la planta.
Por supuesto, si la planta está seca ya casi no tendrá solución así que habrá que pensar en plantas que empiecen a marchitarse y las cojas a tiempo.
Este remedio ha de usarse con cuidado ya que, aunque es bueno el zumo de naranja, también puede hacer que acudan bichitos a las plantas y podemos estar, sin saberlo, atrayendo plagas a las plantas.