Puede que hayáis visto en alguna película de ciencia ficción que las plantas pueden llegar a emitir cierta clase de luz, como por ejemplo en la película Avatar. En un principio podríamos pensar que eso es biológicamente imposible, pero lo cierto es que es totalmente plausible.
El MIT y las plantas nanobiónicas
Desde el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han hecho posible lo que se conoce como plantas nanobiónicas. Estas plantas ya son una realidad y pueden brillar sin problemas en la oscuridad.
Se trata de un nuevo proyecto que se basa en la incorporación de varias nanopartículas de luciferasa y coenzima en las hojas de las plantas de los berros. Tras ello solo hay que esperar a que llegue la oscuridad y de esta forma la planta estará iluminada de forma autónoma durante unas cuatro horas aproximadamente.
Lo que se pretende conseguir es que las plantas nanobiónicas puedan llegar a convertirse en las sustitutas de flexos o lámparas pequeñas que podemos tener en los escritorios de nuestros hogares, con el consiguiente ahorro económico que ello conlleva.
Se busca sustituir las fuentes de luz tradicionales
Tal como declaró Michael Strano, el autor principal del estudio, lo que se pretende es hacer que una planta funcione como si se tratase de una lámpara de escritorio y que no tenga necesidad de ser enchufada. Finalmente, la luz se impulsa por el propio metabolismo energético de la planta.
De esta forma, y según han avanzado desde este prestigioso instituto tecnológico, se trata de un invento vanguardista que puede aplicarse en cuanto a la iluminación artificial de baja intensidad o la imposición de las plantas nanobiónicas para sustituir a las farolas que hay en la calle.
Aunque seguramente será a largo plazo, el objetivo de este proyecto es conseguir que con las plantas que se iluminan puedan sustituirse los aparatos eléctricos convencionales, siempre consiguiendo una energía más limpia y respetuosa con el medio ambiente.