La ficus benjamina es una simpática planta muy resistente que te vale tanto para exterior como para interior, aunque atendiendo siempre a unas condiciones que, dicho sea de paso, no son nada difíciles de cumplir. Esta planta pertenece a la familia del árbol del higo y es originaria del sur y sureste de Asia y de Australia. Hoy en día es común verla en cualquier hogar y se adapta muy bien al clima mediterráneo.
Si la ficus benjamina ha cosechado cierta popularidad como planta de interior es por su resistencia. Mientras no haya heladas, es decir, temperaturas por debajo de cero grados celsius, aguantará. Agradece que se la rocíe con un pulverizador cuando hace calor o a partir de los quince grados.
No requiere muchos cuidados como hemos indicado: que reciba mucha luz, pero no directa, que se la riegue cada diez días en invierno, siempre cuando su tierra se esté secando, y un par de veces en verano. Nada de ahogarla en agua, aunque este consejo casi es válido para cualquier planta de interior.
La ficus benjamina necesita en primavera y verano un fertilizante líquido que deberás aplicar según las instrucciones del productor. Una vez al mes sería muy recomendable que añadieras hierro a su agua. Y esto, básicamente, es lo que tienes que hacer para que tu ficus benjamina crezca sana y adorne el interior de tu casa. Si la vas a tener fuera, hazlo solo durante los meses más cálidos del año.
¡Ah! Importante. Si tu ficus benjamina se pela del todo por lo que sea, ¡no te desprendas de ella! Esta planta de interior tiene la capacidad de regenerarse casi desde cero, así que dale una oportunidad.
Hola y saludos, me gustaria que me ayudaran en cuanto a los abonos de estas plantas que tipo de abono,nombre, cantidad etc. gracias y saludos.