Hay veces en las que nos encontramos con plantas con nombres muy raros o que nos llaman la atención. En mi caso me suelo llevar por eso mismo, porque me llama la atención ese nombre, aunque en realidad después sean fáciles o difíciles de mantener y más de una se me halla muerto.
Algo así pasa con la planta Costilla de Adán, conocida tambien por Monstera. Es una planta que tolera los rincones oscuros y siempre debe estar alejada del sol directo porque no lo tolera en ningún momento.
Además, tampoco le gusta el exceso de agua y, para regarla, hay que esperar a que el substrato se le seque porque si no puede acabar muriendo. Si se le notan las hojas pálidas hay que darle nutrientes, normalmente en forma de abono (que tendrá que hacerse todas las semanas durante su periodo de crecimiento).