Menta

Conocido desde la antigüedad, la Menta es una hierba con propiedades curativas. También se utiliza en la cocina árabe como una especia.

Descripción:
Es una hierba perenne, que se propaga rápidamente, Menta tiene pequeñas flores de color violeta-púrpura o flores de color blanco que florecen en todo su período de crecimiento. Dependiendo del tipo, la hierba puede crecer hasta 60 o 90 cm de altura. Una particularidad de esta planta está representada por la «Menta naranja» que emite un sutil perfume de naranja.

Menta puede cultivarse en cualquier zona con un clima templado. Tolera suelos arenosos, pero necesita ser plantado en un lugar soleado. Que necesita grandes cantidades de agua, especialmente si la tierra es arcillosa.

Propiedades:
Debido a sus compuestos activos que tiene, la Menta tiene propiedades; sedantes, desinfectantes y cicatrizantes. Puede ser utilizado con éxito en los trastornos gastro-intestinales, que ayuda al hígado y calma la indigestión. Contiene mentol, Mentofurano, limoneno, acético, vitamina C y sustancias antibióticas.

Tratamientos:
Debido a su mentol, tiene una muy buena acción sobre el sistema digestivo, causando una pequeña anestesia de la mucosa gástrica. También estimula la digestión.

Menta puede tratar la diarrea, fiebre gástrica o tóxicas infecciones. Estimula la secreción biliar y ayuda a la digestión de las grasas.

Se recomienda en casos de asma, bronquitis y la gripe debido a sus propiedades sedantes y antiespasmódicas. La Sinusitis puede ser tratada también con Menta, mentol, porque es un dilatador de la membrana mucosa nasal. Se puede utilizar como una inhalación en pequeñas cantidades.

Mezclas:
Para hacer el té, se debe hervir una cucharada de hojas de Menta en 200 ml de agua. El té debe ser tomado, tres veces al día.

El reumatismo puede tratarse también con baños de Menta , obtenido por ebullición 200g de hojas en 3 litros de agua y el resultado de la mezcla con agua a 37 grados Celsius.

Precaución
Hay algunas advertencias sobre el uso de aceite de Menta; no se recomienda el uso de aceite de Menta durante el embarazo y la lactancia o para aplicar en la piel de los bebés. Para uso externo, el aceite de Menta debe diluirse, en no más de 30 gotas de aceite y debe utilizarse como crema para la piel.