Si tienes la suerte de contar con un jardín donde cultivar flores y plantas de cualquier especie, puede que te interese plantar un jazmín, una especie que hay que cuidar con mucho mimo y dedicarle cierto tiempo para que ésta crezca sana y siempre nos muestre su mejor aspecto.
El suelo debe estar bien drenado y si puede ser, debe contar con algo de arena y mucho mejor si existe alguna clase de mezcla de tierras. Es importante que el agua no se quede estancada para evita que las raíces se pudran.
Es importante que se planten en una zona del jardín donde le dé el sol durante varias horas del día, aunque no demasiadas, pudiendo ser ideal una zona de semisombra. Hay que intentar también erradicar las malas hierbas de las proximidades dado que estas pueden arruinar la belleza de esta planta.
Cuando llegan los meses de frío, hay que protegerlo así como de las heladas. Se puede poner un toldo o un recubrimiento de nylon para que el frío intenso no les afecte, aunque si vives en una zona donde los inviernos son cálidos, seguro que no necesitarás protegerlo. Si se cuida bien, esta planta ofrece unas flores preciosas de las que seguro te gustará disfrutar en todo momento.